Durante este fin de semana, hemos obtenido ramas procedentes de una higuera, la cual necesitaba una buena poda. Una vez seca, procederemos a quemar esta materia vegetal para obtener cenizas que contendrán un aporte considerable de hierro, siendo apropiadas para la elaboración de esmaltes de alta temperatura.
Tras descargar las ramas, se colocan sobre una superficie de palets de madera para aislarlas del suelo, y se dejan secar hasta que hayan perdido toda la humedad. Posteriormente las quemaremos en nuestro horno de tiro invertido y seguiremos el proceso. En próximas entradas mostraremos el resultado.